sábado, 17 de octubre de 2009

En algún lugar, sobre el Arco Iris

Esta canción termina preguntándose, si los pajarillos vuelan más allá del arco iris, ¿por qué no puedo hacerlo yo? Siempre hay que pensar que podemos, siempre es preciso esforzarse y siempre se puede llegar es cuestión de creer.

When all the world /Is a hopeless jumble
And the raindrops / Tumble all around
Heaven opens a magic lane ...
When all the clouds / Darken up the skyway
There's a rainbow / Highway to be found
Leading from your windowpane / To a place behind the sun
Just a step beyond the rain ...
Somewhere, over the rainbow / Way up high
There's a land that I dreamed of / Once in a lullaby.
Somewhere, over the rainbow / Skies are blue
And the dreams / That you dare to dream
Really do come true.

Some day I'll wish upon a star / And wake up
Where the clouds are / Far behind me
Where laughter falls / Like lemon drops
Away above the chimney tops / That's where you'll find me ...
Somewhere, over the rainbow / Skies are blue
And the dreams / That you dare to dream
Really do come true.
If happy little bluebirds fly
Beyond the rainbow

Why, oh, why can't I?


La letra salió de aquí.

viernes, 16 de octubre de 2009

Bambú japonés

Esta es una pequeña historia que nos tiene que hacer reflexionar sobre nuestra labor docente, igual que el bambú japonés, los maestros siembran, abonan y riegan el conocimiento de sus alumnos, para que en el futuro, aunque a veces esté lejano se conviertan en fuertes brotes de bambú...

No hay que ser agricultor para saber que una buena cosecha requiere de buena semilla, buen abono y riego constante. También es obvio que quien cultiva la tierra no se para impaciente frente a la semilla sembrada y grita con todas sus fuerzas: Crece, maldita seas!

Hay algo muy curioso que sucede con el bambú japonés y que lo transforma en no apto para impacientes: Siembras la semilla, la abonas, y te ocupas de regarla constantemente. Durante los primeros meses no sucede nada apreciable. En realidad no pasa nada con la semilla durante los primeros siete años, a tal punto, que un cultivador inexperto estaría convencido de haber comprado semillas infértiles.

Sin embargo, durante el séptimo año, en un período de sólo seis semanas la planta de bambú crece ¡más de 30 metros! ¿Tardó sólo seis semanas en crecer?

No, la verdad es que se tomó siete años y seis semanas en desarrollarse. Durante los primeros siete años de aparente inactividad, este bambú estaba generando un complejo sistema de raíces que le permitirían sostener el crecimiento que iba a tener después de siete años.

Y para saber más sobre el bambú japonés, que en realiad es originario de China, puedes mirar aquí